MI SAGRADO CORAZÓN ES VUESTRO CIELO
"En Mi Sagrado Corazón están las riquezas y el honor, abundancia y lealtad duraderas. Mis tesoros os harán caminar en la senda de la virtud. Dichosos los ojos que ven lo que ellos ven en Mi Corazón y lo obtienen: él conseguirá vida y logrará el favor de Mi Padre, y Nosotros estaremos a su lado, deleitándole día tras día, derramando bendición tras bendición sobre él y toda su casa. Mi Sagrado Corazón es como una fragancia apaciguadora; es como el sol brillando en vuestra oscuridad. Mi Sagrado Corazón es más dulce que la miel y doy la bienvenida a todas las bocas para que gusten Mi dulzura. Mi Sagrado Corazón es como un macizo de rosas selectas. Mi Sagrado Corazón está lleno de gracia. Sí, es como un pozo del que brota Vida."
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Ayer fue un día repleto de bendiciones. Fuimos a repartir los Mensajes a una peregrinación que se hace en las afueras de la ciudad en devoción all Sagrado Corazón. Todo fue perfecto y cada detalle fue un regalo del Señor para nuestros corazones un poco cansados de tantos rechazos. Llegamos al santuario del Sagrado Corazón luego de una hora y media de viaje, y estaba repleto de gente. Todas las parroquias del obispado dedicadas al Sagrado Corazón venían a pie con sus imágenes y cada vez que llegaba un grupo de peregrinos se los recibía con aplausos. Había al lado del santuario mesas con los diferentes grupos parroquiales y de los de diversos ministerios. Los cantos de la RCC se oían por todas partes. Y en el primer tramo del sendero al lado del lugar donde se iba celebrar la misa que presidiría el obispo estabamos nosotros con los Mensajes de la Verdadera Vida en Dios. Los que habían llegado antes nos compartieron que uno de los servidores de la RCC rezó en nuestra mesa y dijo que el Señor y la Virgen estaban muy felices de que estuviéramos allí. Repartimos fotocopias de uno de los mensajes referidos al Sagrado Córazón por todos lados y fue una alegría indiscriptible que vinieran a pedírnoslas. Las personas sencillas, que aman a Dios con el corazón, las pedían, con esa humildad del que está acostumbrado a hacerlo, para alguién de la familia, para llevarselas a sus vecinos, a sus amigos enfermos, es decir para compartirlos con otros. Nos dimos cuenta allí que la Verdadera Vida en Dios tiene tantas oraciones porque esta es la forma de que los sencillos de corazón y pobres en el bolsillo la leerán y rogarán al Padre con la fe de los niños. No todos tienen el dinero para comprar los libros y el Señor pensó en ellos. Creo que ayer el Señor nos abrió una nuevo sendero en donde más se necesita de esperanza aunque no sepamos más que eso. La misa fue hermosa y el obispo pidió que hagamos penitencia los viernes como manda la Iglesia por todos nuestros gobernantes y que oremos por los obispos en vez de criticarlos. Es lo que nos viene recordando la Virgen desde Fatima y en sus apariciones en todo el mundo y también el Señor en la Verdadera Vida en Dios. Y sólo se recuerda lo que se ha olvidado.
Bendita sea mi Roca,
Bendito sea mi Salvador,
Bendito sea Su Sagrado Corazón,
este Corazón que manifiesta su
Amor por toda la humanidad.
Este Corazón que es más deseable
que el más fino oro, porque los
tesoros 1 que contiene son
más dulces que la miel.
Bendito sea Su Sagrado Corazón,
este Corazón que me levantó
y me formó.
¡Oh, Señor, ven y manifiesta a
la humanidad Tus maravillas, ven
y exhibe Tu maravillosa Bondad!
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Ayer fue un día repleto de bendiciones. Fuimos a repartir los Mensajes a una peregrinación que se hace en las afueras de la ciudad en devoción all Sagrado Corazón. Todo fue perfecto y cada detalle fue un regalo del Señor para nuestros corazones un poco cansados de tantos rechazos. Llegamos al santuario del Sagrado Corazón luego de una hora y media de viaje, y estaba repleto de gente. Todas las parroquias del obispado dedicadas al Sagrado Corazón venían a pie con sus imágenes y cada vez que llegaba un grupo de peregrinos se los recibía con aplausos. Había al lado del santuario mesas con los diferentes grupos parroquiales y de los de diversos ministerios. Los cantos de la RCC se oían por todas partes. Y en el primer tramo del sendero al lado del lugar donde se iba celebrar la misa que presidiría el obispo estabamos nosotros con los Mensajes de la Verdadera Vida en Dios. Los que habían llegado antes nos compartieron que uno de los servidores de la RCC rezó en nuestra mesa y dijo que el Señor y la Virgen estaban muy felices de que estuviéramos allí. Repartimos fotocopias de uno de los mensajes referidos al Sagrado Córazón por todos lados y fue una alegría indiscriptible que vinieran a pedírnoslas. Las personas sencillas, que aman a Dios con el corazón, las pedían, con esa humildad del que está acostumbrado a hacerlo, para alguién de la familia, para llevarselas a sus vecinos, a sus amigos enfermos, es decir para compartirlos con otros. Nos dimos cuenta allí que la Verdadera Vida en Dios tiene tantas oraciones porque esta es la forma de que los sencillos de corazón y pobres en el bolsillo la leerán y rogarán al Padre con la fe de los niños. No todos tienen el dinero para comprar los libros y el Señor pensó en ellos. Creo que ayer el Señor nos abrió una nuevo sendero en donde más se necesita de esperanza aunque no sepamos más que eso. La misa fue hermosa y el obispo pidió que hagamos penitencia los viernes como manda la Iglesia por todos nuestros gobernantes y que oremos por los obispos en vez de criticarlos. Es lo que nos viene recordando la Virgen desde Fatima y en sus apariciones en todo el mundo y también el Señor en la Verdadera Vida en Dios. Y sólo se recuerda lo que se ha olvidado.
Bendita sea mi Roca,
Bendito sea mi Salvador,
Bendito sea Su Sagrado Corazón,
este Corazón que manifiesta su
Amor por toda la humanidad.
Este Corazón que es más deseable
que el más fino oro, porque los
tesoros 1 que contiene son
más dulces que la miel.
Bendito sea Su Sagrado Corazón,
este Corazón que me levantó
y me formó.
¡Oh, Señor, ven y manifiesta a
la humanidad Tus maravillas, ven
y exhibe Tu maravillosa Bondad!
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